Mi decisión vale

            El aborto es el acto de interrumpir un embarazo, ya sea atencional o intencionalmente, en Venezuela esto se ha convertido en un tema tabú, ni la gente ni los medios hablan sobre este tema, y pensamos que se debe esta reprimenda en mayor parte por el Código Penal que castiga el aborto en sus artículos 430 y 431 que dicen lo siguiente:

Artículo 430: La mujer que intencionalmente abortare, valiéndose para ello de medios empleados por ella misma, o por un tercero, con su consentimiento, será castigada con prisión de 6 meses a 2 años.

Artículo 431: El que hubiere provocado el aborto a una mujer, con el consentimiento de esta, será castigado con prisión de doce a treinta meses.

         El aborto es ilegal salvo que se ponga en riesgo la vida o la salud de la madre.

         En la página de ProSalud en su artículo llamado “Aborto” hablan sobre el tema y mencionan que “el programa de Salud Materno y Maternidad sin Riesgos de la OMS señala en estimaciones inéditas que en América Latina y el Caribe se calculan 6000 muertes anuales por abortos en malas condiciones.” Con respecto a esto podemos argumentar que una ley que no castigue el aborto sería una mejor opción en Venezuela, porque con esto podríamos tener entonces acceso a clínicas y hospitales en donde se pudiera realizar esta práctica sin riesgo alguno.

         Dice la socióloga Evangelina García Prince que la solución más viable y oportuna sería encontrar una “resolución de carácter legal que, respetando a quienes están en contra del aborto, permita que por la autonomía cívica a quienes pudieran estar a favor de esta práctica usaran los recursos que les ofrece la legislación para emprender el aborto”, viéndolo de esta forma desde nuestro punto de vista no podemos decir que aprobar una ley con tales características esta fuera de lugar, ya que muchos son los problemas con respecto a el embarazo en adolescentes que es muy común, y la pobreza extrema.

         Cabe destacar que los programas para la prevención de un embarazo no deseado son muy limitados y no llegan a toda Caracas, además está también el tema de la educación sexual que no suele abordarse en profundidad haciendo que entonces las “pautas de relación entre hombres y mujeres se aprenden sobre la marcha” como lo dice García Prince en una entrevista para “Contrapunto” apunta también que la educación sexual es casi inexistente.

         Podemos decir entonces que estamos de acuerdo con que el aborto sea una cuestión de decidir por ti y por tu vida. 

Chelsy Rondón

03/11/2015